El panorama electoral parece muy volcado a un bando, en general. Los indecisos, que generalmente decantan la situación a un lado o a otro, tienen ahora una escisión (socialmente hablando) representada por los indignados, que no poseen el volumen suficiente para jugar un pape de bisagra, ¿o sí?
http://www.elmundo.es/elmundo/2011/11/11/espana/1321014158.html
Comentario posterior: ahora, a fecha 22 de noviembre y con un parlamento ya definido, pintado de azul, las incertidumbres son casii las mismas. ¿Hemos provocado un cambio real? Veremos.
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